Otro pez gordo: Fito

Otro pez gordo. De marca mayor.

Mas oscuro que Salord. Mucho más. Se trata de Adolfo Villafranca, alias "Fito".

Ostento ocho años la más elevada representación pública como diputado del PPy ni siquiera pudo recoger suficientes instantanes para lllenar un simple portafotos de su mesita.

En la tele no se le vió nunca -no digamos ya "orar"- Hasta la llegada de su digno sucesor, el oscuro y faltón Salord el encabeza el ranking del absentismo en el Congreso.

Ni se tomo la molestia de abrir una oficinilla del diputado con una maja para recoger sugerencias y peticiones. ¿Pa que?

Ninguna aportación suya se recuerda. Ni tampoco que tuviera mano en la paella ni que removiera el chocolate en merendolas de barrio; ni que regalara flores a las pescadera. Era un verdadero pez gordo con clase, de los que no se arremangan ni descomponen; si acaso el día de pascua por la mañana con su winchester y su chaleco -y las características gafas negras de los peixots locales- descerrajar tiros a un pelele.

También,recuerdo que tuvo la chulería de cortar el tráfico de la principal arteria de la ciudad para practicar -con dos cojones- su afición secreta: la conducción a ciegas. Fue un episodio oscuro y turbio. Realmente alucinante. Se hizo de tapadillo pero había de ser luego evidente, ante el aparato y el espacio debido utilizar. Y todos callaron ante el escándalo. Era Fito, psss.

Psss es a lo que convoca mencionar su nombre.

Proyectos de negocios turbios -siempre utilizando a los demás para dar la cara-.

Y un chalet ilegal. Un chalet muy grande. Un chalet digno de Fito.

¿Legalidad?

"Si yo soy Fito".

Genuino pez gordo incomparable del graneros. Pelón y de grandes gafas negras. Tan chulo que obviaba la campechanía; y desde luego no lo pillarán en el futbol con voz aguardentosa enfurecido insultando a cuatro pobres bandarras.
Lo suyo son otras esferas.

Fito. Un genuino peixot del granero.

Caza mayor.